martes, 31 de diciembre de 2013

3. DIBUJO A LÁPIZ DE MI ROSTRO

Esta es la segunda parte del PROYECTO 1, y consiste en explorar las directrices de proporción y armonía que tiene un rostro humano. Para ello tuvimos que hacer un dibujo a lápiz de la propia cara o de la del compañero a tamaño natural (yo opté por hacer mi cara).

Después, hice un calco de este dibujo en 2 hojas diferentes de Din A3. En uno de ellos deformé los rasgos de la cara hasta obtener una expresión alegre.En otro deformé los rasgos de la cara hasta obtener una expresión de susto.

Al final tenía  tres retratos: 1 de alegre, 1 de trágico y 1 de neutro.
A continuación, apliqué tres técnicas para cada uno de mis retratos:  pintura de color, collage, y trazo negro (rotulador, grafito, carboncillo ...).



Esta imagen corresponde al primer retrato que me hice. Para ello utilicé el lápiz y realicé las sombras correspondientes. Tuve que hacerme muchas fotos y a partir de ahí fui trabajando el retrato.





Éste es el segundo dibujo que realicé. Como se puede comprobar le hice una expresión alegre, aunque a la hora de utilizar la técnica de la pintura acrílica me costó bastante que las expresiones me quedaran bien.



El tercer dibujo ha sido el que más me ha gustado realizar, no obstante fue el que más me costó, ya que tuve que ir papelito por papelito pegándolo a la imagen. Para darle mayor importancia a la expresión de susto, lo que hice fue colocarle las manos en la cara.

2. PROYECTO 1: LAS CARAS DE BRUNO MUNARI

Comenta la cita de Bruno Munari según la cual, "con dos puntos y dos líneas perpendiculares puedo hacer una cara".

El objetivo de esta práctica es que a través del punto y la línea podemos representar rostros como el artista Bruno Munari. 

Bruno Munari fue un artista y diseñador italiano, que contribuyó en muchos fundamentos de las artes visuales (pintura, escultura, cine), artes no visuales (literatura, poesía y didáctica con la investigación del juego del sujeto, la infancia y la creatividad), del diseño industrial y gráfico, fue un artista polifacético el cual hizo incursiones con éxito en diferentes áreas del conocimiento, desde el diseño industrial, arquitectónico y editorial con el diseño de libros.Además, pone las imágenes creando retratos y multitudes en movimiento con un estilo de abstracción y ejercicio estético bastante insólito, de elementos mínimos y placer reconocible y contagioso, de aquel que nos hace sentir ganas de coger un lápiz con la convicción que el arte es una cosa simple y al alcance de todos. No siempre lo hace, sin embargo, en una relación perceptible con el carácter o la función de los personajes.


En nuestro primer ejercicio el objetivo era realizar  formes complejas a través de simples elementos como puntos y líneas. Antes de realizar esta práctica observamos unos ejemplos de algunos rostros realizados por Bruno Munari donde podíamos ver que a través de puntos y líneas se podían crear rostros diferentes y muy originales.



Para empezar, hice un esbozo de 20 rostros a través del punto y la línea. Aunque parece sencillo, la realidad es totalmente otra, porque me costó empezar a imaginar caras y representarlas en el papel. Así pues, pude verificar la cita de Bruno Munari "con dos puntos y dos líneas perpendiculares puedo hacer una cara". 


La imagen de la derecha fueron mis primeros rostros. Después, comente con la profesora los dibujos y me sugirió que cambiara varias cosas, como por ejemplo, las expresiones de los rostros o el pelo que les añadí, ya que son elementos que se debían poner después y no en este ejercicio.



Así que fui retocando mis rostros y este fue el resultado final:






A continuación, elegí uno de los 20 rostros obtenidos (el que me pareció que podía sacarle más partido a la hora de hacerle los detalles y el que estéticamente podía quedar más realista). Con el rostro elegido, lo que hice fue ampliarlo en un Din A3 y le dí grosor y relieve a las líneas. Además, fui añadiendo detalles como la mano con un anillo. Para realizar el relieve utilicé diferentes materiales, como por ejemplo, cinta elástica, purpurina, cartulina, papel de periódico, etc. También, le hice un sombrero muy curioso con collage que me gustó mucho como quedó.











1. ME PONGO A DIBUJAR (Javier Seguí)

Abro mi cuaderno y, con instrumentos suaves, dejo que mi mano se deslice sobre él. Sólo miro de soslayo, cuando brazo y mano gesticulan y se desplazan llenando de trazos la superficie blanca.
No copio ni pienso nada preciso, asisto al espectáculo de esta danza decidida y ocasional. A veces es un baile lento y entrecortado, aunque otras el ritmo se acelera, o se para de repente. También cambian los trayectos, rectos, curvos o accidentados. Y sus localizaciones. Es un placer sentir los movimientos y espiar la aparición de las huellas que, poco a poco, conquistan el cuadro y se superponen marcando misteriosas densidades. Llega el momento en que la danza arbitraria se detiene y, entonces, advierto la totalidad como un cosmos envolvente que me estimula con indicios de presencias por precisar, o que me oprime sin remedio. En estos casos cabe romper el papel o sumergir los trazos en otros trazos, a la búsqueda de una nueva configuración más espesa.

Javier Seguí.

El texto de Javier Seguí es una bonita manera de expresar lo que es el arte de dibujar. Él, describe que a veces el trazo puede ser más rápido o más lento o que que incluso puede detenerse sin pensarlo. Esta es una gran realidad, porque todo el mundo antes de empezar a dibujar debe pensar que realizará pero que parece que a medida que vas trazando las líneas, a veces pueden ser tal como las has imaginado o incluso muy diferentes.

¿Tienes costumbre de dibujar?
 En caso afirmativo ¿Qué dibujas? ¿Por qué? ¿Con qué material?
En caso negativo ¿Recuerdas cuando dejaste de hacerlo? ¿Te gustaría retomarlo?¿Qué te gustaría saber dibujar?

No tengo costumbre de dibujar, ya que es algo que no se me ha dado bien, pero me encantaría formarme y ahora tengo la oportunidad de aprender diferentes técnicas de dibujo y poder retomarlo.

Si soy sincera no recuerdo con exactitud cuando dejé de dibujar, pero creo que más o menos sería cuando acabé la secundaria. Hace mucho tiempo de eso, porque ahora tengo 27 años. Me encantaría volver a empezar a dibujar y aprender mil cosas nuevas y espero que se despierte en mí esa creatividad que creo que tengo.


En principio, en este semestre me gustaría aprender a dibujar rostros y paisajes, aunque lo veo complicado y admiro a todos los que dibujan bien porque no es una tarea fácil y creo que nacen con un don. Después, y a lo largo del curso espero crear mi propio estilo en cuanto al dibujo y aprender de todos y cada uno de mis compañeros.


En definitiva, quiero aprender a usar técnicas que me ayuden a mejorar y perfeccionar mis dibujos y eso intentaré conseguirlo asistiendo cada día a clase.